Era un vuelo de pasajeros viajaba desde el Aeropuerto de Moscú - Sheremetyevo y el Aeropuerto Internacional de Perm - Bolshoe Savino, ambos en Rusia, el 14 de septiembre de 2008. El avión implicado era un Boeing 737-500, operado por Aeroflot - Nord.
La aeronave se estrelló en la aproximación al Aeropuerto Internacional de Perm - Bolshoe Savino. El factor más importante que causó el accidente fue que los pilotos perdieron la orientación por la falta de experiencia con el horizonte artificial occidental, diferente a los que son entrenados los pilotos rusos. Otros factores también contribuyentes fueron el consumo de alcohol del capitán, el cansancio de la tripulación y la mala gestión de los recursos de los pilotos.
Fallecieron 88 personas a bordo y se convirtió en el peor accidente de ese año, siendo superado por el vuelo 5022 de Spanair.
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