Era un vuelo de pasajeros que cubría la ruta entre la Base de la Fuerza Aérea Travis ( Estados Unidos ) y la Base Aérea Clark ( Filipinas ), con paradas para repostar en Honolulú, la isla Wake y Guam, el 16 de marzo de 1962. El avión desaparecido era un Lockheed Constellation L-1049H.
La aeronave transportaba a 96 militares, 93 estadounidenses y 3 vietnamitas, y 11 tripulantes civiles estadounidenses. La misión consistía en relevar a los militares que habían estado entrenando a los vietnamitas a enfrentarse al Viet Cong en la Guerra de Vietnam. Casi una hora y media después de de despegar de Guam, los controladores, quienes tenían que volver a recibir información por parte del vuelo, no pudieron ponerse en contacto, algo que no volvería a suceder después. Al desaparecer, la Armada, la Fuerza Aérea, la Guardia Costera y los Marines ordenaron que barcos y aviones registraran la zona para buscar el aparato. Se hizo lo posible por encontrarlo, pero después de ocho días, se terminó la búsqueda, habiendo cubierto más de 520.000 km² de Océano Pacífico, y las 107 personas a bordo fueron declaradas fallecidas, aunque nuca se encontraron cuerpos.
Como en este tipo de desapariciones, no tardaron en haber conspiraciones. Se cree que el avión fue destruido en el aire, pues otro avión de la compañía se estrelló en las islas Aleutianas y transportaba cargamento militar secreto, y ambos tuvieron dificultades durante el vuelo.
La principal teoría es la de un posible sabotaje. El petrolero liberiano SS TL Linzen informó que la tripulación vio cómo una luz brillante aparecía en el cielo cercana a una hora y media después del último contacto del avión con los controladores, y que se vio dos luces rojas que caían al océano. El buque se dirigió a la zona para localizar la aeronave, pero no hubo éxito, y las autoridades estadounidenses, al contar con esta única información, dio como posible que lo que vieron la tripulación del barco fue al Lockheed Constellation L-1049H incendiarse mientras caía al agua. Por tanto, se cree que hubo una explosión a bordo que sentenció a la aeronave y a los que iban a bordo, pero como no había pruebas suficientes, no se concluyó con exactitud la causa de la desaparición.