Fue un vuelo de carga que iba desde el Aeropuerto Internacional Daniel K. Inouye en Honolulú y el Aeropuerto de Kahului, ambos aeropuertos en Hawái, Estados Unidos, el 2 de julio de 2021. El avión accidentado fue un Boeing 737-200.
Despegaron de Honolulú y a los 10 min, los pilotos informaron de la pérdida del motor nº1. Por ello, decidieron girar para volver al aeropuerto y realizar un aterrizaje de emergencia. Justo 5 min después, el motor nº2 sufrió un sobrecalentamiento, y comunicaron que iban a tener que amerizar. La aeronave finalmente amerizó en el océano, a 4 km del aeropuerto de origen, con los 2 pilotos con lesiones muy graves, pero habiendo sido rescatados y más tarde recuperado, sin tener que lamentar víctimas mortales.
El informe final por los investigadores sacaría a la luz los distintos causantes del accidente. El más importante fue que los pilotos no identificaron el motor dañado al comienzo, siendo el nº2 en vez del nº1. Reduciendo la potencia del motor equivocado que funcionaba correctamente y el aumento del motor dañado inicialmente conllevó al fallo por en ambos motores. Otros factores fueron el estrés, la enorme carga de trabajo y la mala gestión de los recursos de cabina.
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