Era un vuelo que iba desde el Aeropuerto Internacional Enrique Adolfo Jiménez - Colón y el Aeropuerto Marcos Gelabert - Patillas, ambos aeropuertos en Panamá, el 19 de julio de 1994. El avión accidentado fue un Embraer EMB 110 Bandeirante.
Después de despegar con normalidad, a los 10 min de vuelo, un fogonazo y una potente explosión sacudió a la aeronave, cayendo en pedazos contra el suelo a unos pocos kilómetros de la pista del aeropuerto. Fallecieron las 21 personas a bordo.
La posterior investigación desveló que fue un ataque terrorista perpetrado por el grupo radical islámico y libanés Hezbolá, dirigido hacia la comunidad judía. Es el peor atentado terrorista en la historia de Panamá.
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