sábado, 4 de febrero de 2023

VUELO 2120 DE NIGERIA AIRWAYS

Era un vuelo comercial que cubría entre el Aeropuerto Internacional Rey Abdulaziz (La Meca, Arabia Saudí) y el Aeropuerto Internacional Sadiq Abubakar III (Sokoto, Nigeria), el 11 de julio de 1991. La aeronave estrellada era un Douglas DC-8-61.

El avión estaba alquilado por parte de Nigeria Airways a Nationair, de Canadá, en el momento del desastre. Previo al despegue, el mecánico se fijó que la presión de los neumáticos nº2 y nº4 estaban por debajo de la presión mínima de despegue. Fue a inflarlos pero no había gas nitrógeno disponible, y el director del proyecto no quería ningún retraso en el vuelo, por lo que se siguió adelante con la preparación del viaje. La catástrofe ocurriría tarde o temprano.

Durante el rodaje a pista, el paso de más carga de la rueda nº2 desinflada a la nº1 provocó un sobrecalentamiento y debilitamiento de dicha rueda. Cuando la aeronave comenzó a avanzar por la pista, el neumático nº1 falló y reventó, y justo después el nº2, dejando de girar. Esto provocó que ese roce con el asfalto de la pista fuese la chispa para que se creara un incendio. Los pilotos desconocían la magnitud del incendio, pues no había sensores de incendio en el tren de aterrizaje. A pesar de todo, los pilotos decidieron despegar, y es que Junta de Seguridad en el Transporte de Canadá, los procedimientos ante el fallo de los neumáticos durante el despegue mientras seguían en pista en un DC-8 no incluía tener que abortar el despegue.

Cuando el tren de aterrizaje se retrajo, ya no había nada que hacer. El caucho quemado de los neumáticos, al estar cerca del sistema hidráulico y eléctrico, intensificó el fuego y se expandió por la parte inferior del aparato. Además, los sistemas de control fallaron y la aeronave cada vez era más difícil de controlar. Los pilotos, en un último intento de salvar la situación, se dirigieron al aeropuerto saudí para realizar un aterrizaje de emergencia. Sin embargo, el avión se estrelló cerca de la pista, falleciendo 261 personas a bordo.

La principal causa de la catástrofe fue el penoso mantenimiento de las ruedas, además de la horrorosa dirección de vuelo del director de proyecto que, conociendo el estado de los neumáticos, decidió seguir adelante para no sufrir más retrasos. Y es que los ejecutivos de Nationair presionaron a la tripulación de cabina para que ocultaran la información de las malas condiciones de seguridad del avión. En 1993, tras muchas huelgas y un cierre patronal de 15 meses, la aerolínea canadiense se declaró en bancarrota y su propietario fue culpable de ocho cargos de fraude en las actividades de su empresa.

Fue el peor accidente aéreo de 1991 y el segundo peor en la historia de Arabia Saudí tras el vuelo 163 de Saudia donde fallecieron 301 personas en 1980. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario